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12/07/16

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Levantemos Europa, por Marc Ribes

“Deseo hablarles hoy sobre la tragedia de Europa. Este noble continente, que abarca las regiones más privilegiadas y cultivadas de la tierra, que disfruta de un clima templado y uniforme, es la cuna de todas las razas originarias del mundo. Es la cuna de la fe y la ética cristiana. Es el origen de casi todas las culturas, artes, filosofía y ciencias, tanto de los tiempos modernos como de los antiguos. Si Europa se uniera, compartiendo su herencia común, la felicidad, prosperidad y la gloria que disfruta rían sus tres o cuatrocientos millones de habitantes no tendría límites.

A pesar de todo, aún hay un remedio que si se adoptara de una manera general y espontánea, podría cambiar todo el panorama como por ensalmo, y en pocos años podría convertir a Europa, o a la mayor parte de ella, en algo tan libre y feliz como es Suiza hoy en día. ¿Cuál es ese eficaz remedio? Es volver a crear la familia europea, o al menos todo lo que se pueda de ella, y dotarla de una estructura bajo la cual pueda vivir en paz, seguridad y libertad. Tenemos que construir una especia de Estados Unidos de Europa, y sólo de esta manera cientos de millones de trabajadores serán capaces de recuperar las sencillas alegrías y esperanzas que hacen que la vida merezca la pena. El proceso es sencillo. Todo lo que se necesita es el propósito de cientos de millones de hombres y mujeres, de hacer el bien en lugar de hacer el mal y obtener como recompensa bendiciones en lugar de maldiciones.

Por eso os digo ¡Levantemos Europa!”

Churchill en Zurich 1946

 

Hace 65 años, W. Churchill, hizo un discurso, al terminar la segunda guerra mundial, en el que evocaba la creación de una Europa unida y próspera, que dejara atrás el enfrentamiento entre las distintas naciones y que diera un paso para crear un bloque común capaz de competir con las grandes potencias. He querido rescatar una parte de su discurso, que bien podría repescarse hoy en día, por los defensores del REMAIN.

¡Qué frágil es la memoria histórica! ¿Acaso Europa no se ha levantado de algo tan dantesco y terrorífico como son dos guerras mundiales? Europa debería recuperar el espíritu de Churchill, y los líderes políticos olvidarse del electoralismo barato y tener sentido de estado, estado europeo. No es hora de reproches ni de buscar culpables. Si UK ha decidido salir de Europa, debemos afrontarlo sin rencor pero sin dudas. Llega la hora de la reflexión, del tratar de comprender los motivos por los que uno de los aliados, fundadores de Europa, ha decidido abandonar el proyecto común y tratar de crear un Estado, en el que todos estemos seguros que nadie está obligado a quedarse.

No puedo negarles que la noche del histórico jueves 23 de junio, mientras veía atónico como el LEAVE cogía distancia al REMAIN, no dejaba de pensar sobre los acontecimientos que se nos avecinaban, puesto que todos los analistas, teníamos la clara convicción de que UK, continuaría en el proyecto común. Sin embargo, con los datos del mes de junio encima de la mesa, podemos afirmar nuevamente, que una de las normas que siempre quedan en los mercados, es aquello de que la mayor parte de las veces, lo mejor es no hacer nada. Aguantar la volatilidad, saber adaptar el tamaño de posición a las circunstancias de la cartera y evitar problemas en compañías endeudadas o técnicamente en tendencia contraria a la planteada, son elementos clave, para tener éxito en el trading. Siempre que veo episodios como los de junio, recuerdo con gran admiración el prólogo del Sr. Warren Buffett en su obra “El inversor inteligente”. Y es que en una simple hoja, nos divulga con claridad, la importancia de comprar barato y aguantar la volatilidad, en lo que él denomina los mejores capítulos escritos en materia de inversión, el margen de seguridad y el comportamiento del inversor delante de las fluctuaciones del mercado. A partid de ahí podríamos hacer acopio de frases célebres del mundillo, como aquello de que “en la bolsa 2+2=5-1” o que “este negocio es el salario del dolor”, como decía Kostolany. O lo que nos enseñaba Livermore, cuando decir aquello que “la gente solamente quiere soplos, no solamente quiere recibirlos, sino que ansía darlos, pues entra en juego el ego y la vanidad”.

 

Siga leyendo el análisis de Marc Ribes en el número de julio-agosto de la revista online de mercados TraderSecrets.

(FOTO: FLICKR.COM Contando Estrelas)

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