Nos ocupamos en este número del gigante francés de equipamientos para redes telefónicas. Otro claro ejemplo de valor que jamás volverá a cotizar cercano a sus máximos anuales alcanzados en el año 2000, en que llegó a marcas los 90€. Sin embargo, el comienzo su debacle se produjo seis meses después del estallido de la burbuja tecnológica, señal inequívoca de que el mercado sabía diferenciar aún qué tipo de compañías eran de crecimiento por el sector en el que se movían; pero ese sector fagocita todo lo que encuentra a su paso, y ha sido la víctima predilecta del éxito de Nokia, Apple, Samsung, etc. De hecho, tras la recuperación de todos los mercados en marzo de 2009, y tras un intenso rebote, ha sido capaz de marcar un nuevo mínimo en 0,67€ a finales del año pasado.
Si seguimos contemplando el largo plazo, la secuencia de máximos relativos decrecientes no queda rota hasta verse superados niveles de 4,20€. Y ese camino es el que parece en trance de recorrer.
Vamos a diseccionar más el aspecto de medio plazo:
Desde el máximo que alcanzó a mediados de 2011 en 4,25€, la caída fue tan brutal que lo llevó a cotizar en mínimos de 0,67€ en octubre del pasado año. Como no podía ser de otra manera, las sensaciones que transmite desde entonces son bastante alcistas; pero, sobre todo, comportándose de lujo desde el lado del análisis técnico.
Puede seguir leyendo el artículo de Roberto Moro en el número de diciembre de Trader Secrets.