¿Realmente se ha producido esta semana un cambio en el escenario y contexto de mercado de bonos en EE.UU.? La respuesta, que argumentaremos en las siguientes lineas, es «no». Un simple vistazo al chart que muestra la evolución de las dos principales referencias de dicho mercado, el Tbond a 10 y 30 años, pone de manifiesto que, efectivamente, esta semana se han producido notables descensos en la cotización (precio) y equivalentes repuntes en la rentabilidad.
Sin, embargo, y ahí es donde queremos llegar, este movimiento no supone un cambio, giro o revolución respecto a lo que venía aconteciendo. Es decir, no era alcista hasta la semana pasada y los descensos de ésta han truncado dicha tendencia alcista. En absoluto. Podemos considerar aceleración bajista, pero en ningún cambo cambio de escenario. Vean el siguiente chart de los últimos tres meses y el movimiento de esta semana dentro del tramo bajista que comenzó a principios de mayo.
Lo relevante del movimiento actual no radica en su tendencia, objetivamente bajista a corto plazo, sino dónde encaja dentro del puzzle de escenario de largo plazo. Para ello nos ayudamos de un chart mensual que invita a considerar las próximas fechas como claves para valorar posibilidad de presenciar mayor profundidad en la actual fase bajista.
Si la zona de 135 es clave en el Tbond 30Y, más aún lo es la zona 126 de Tbond 10Y. Estamos ante un chart mensual y cotizaciones inferiores a dichos niveles sugieren un evidente deterioro en la estrucutra alcista que ha venido desarrollando en los útimos años. Cesiones que, en cualquier caso, tendrían lógica dentro de un proceso de anticipación de la finalización del programa de compra de activos llevado a cabo por la Reserva Federal así como futuros incrementos en el tipo de interés.