Un desorden sin precedentes (en lo geopolítico y económico) y a la vez mercados financieros en máximos históricos se erigen como una de los grandes paradojas del capitalismo actual
A continuación un análisis de las posibles causas:
- Una era de desorden sin precedentes
Factores estructurales del caos:
- Conflictos armados activos: Ucrania, Gaza, Irán, tensión en el mar de China Meridional y amenaza sobre Taiwán.
- Ruptura del orden multilateral: auge del proteccionismo (aranceles), sanciones, guerra tecnológica (EEUU–China), erosión de la OMC.
- Fragmentación energética y climática: lucha por minerales críticos, inversiones en transición verde, choques por eventos extremos.
- Crisis migratorias y políticas polarizadas: tensiones sociales internas en Europa y América
- Y sin embargo… mercados financieros en máximos
- NASDAQ y S&P 500 han alcanzado récords en 2025.
- Índices europeos Total Return como el DAX, Eurostoxx 50 o el mismo Ibex cotizando en subida libre
- Volatilidad baja (VIX en mínimos históricos).
¿Por qué? Veamos las causas estructurales.
- Causas del “desacople” entre caos global y calma financiera
- Hiperintervención de bancos centrales y gobiernos. Desde 2008 cada crisis se ha resuelto con intervenciones monetarias y fiscales sin precedentes. Por ejemplo, la Pandemia: liquidez ilimitada, tipos cero o negativos. En el caso de las guerras y crisis energéticas: subsidios, límites a precios, gasto público masivo.
Esto ha creado una expectativa de rescate continuo, el famoso “put implícito” (los gobiernos salvan todo).
Resultado: los mercados no temen colapsos. Si hay problemas, “la Fed/ECB/China actuará”.
- Dominancia tecnológica y ganancias concentradas. Gran parte del crecimiento de los mercados proviene de unas pocas “megacorporaciones” (Apple, Microsoft, Nvidia, etc.).
Estas firmas tienen balances sólidos y generan ingresos globales diversificados. De hecho, se benefician de la revolución IA (que sigue impulsando expectativas de rentabilidad futura).
Aunque haya guerras o recesiones, estas empresas siguen generando beneficios récord
- Liquidez aún abundante. A pesar de las subidas de tipos, la liquidez global sigue siendo alta: Los Gobiernos siguen con déficits grandes (EEUU, Europa). Los Bancos centrales han comenzado a bajar tipos nuevamente en 2025.
Los Inversores institucionales “no tienen muchas alternativas” (el famoso TINA: There Is No Alternative). La Renta fija da retornos moderados y los Bienes raíces están golpeados. La Bolsa = refugio de crecimiento.
- Mentalidad post-crisis: el “buy the dip” Desde 2009, cada caída está siendo seguida por una recuperación fuerte gracias a estímulos. Los Inversores minoristas y fondos especulativos han internalizado esa lógica: “El caos es una oportunidad de compra, no un peligro sistémico.”
- ¿Es sostenible este desacople?
Riesgo ¿Por qué importa?
Deuda pública masiva Limita espacio fiscal futuro. EEUU paga +3% del PIB solo en intereses
Fragilidad geopolítica Un conflicto directo China–Taiwán o Irán–EEUU podría sí romper el sistema.
Valoraciones infladas Las acciones de IA cotizan con múltiplos de beneficio extremadamente altos.
Confianza excesiva Si un evento no es rescatable (p. ej., cyberataque masivo), el colapso será rápido.
- Conclusión: resiliencia o complacencia Hemos entrado en una era de «capitalismo de teflón»
Un sistema económico que resiste cada golpe gracias a intervenciones masivas, beneficios empresariales concentrados, y una psicología inversora anclada en la fe del rescate.
Pero esta resiliencia tiene un precio:
- No se resuelven los desequilibrios estructurales.
- Se posponen ajustes dolorosos.
- Se alimenta una burbuja de confianza.
Cuando llegue un evento que no pueda ser contenido con liquidez o política fiscal, el ajuste podría ser más abrupto de lo que nadie anticipa.