La semana pasada el S&P 500 alcanzó un nuevo máximo de 52 semanas e histórico de hecho. El futuro del vencimiento en curso (septiembre) hizo máximos exactamente en los 2,010 puntos y cerró en los 2,006, mientras que el índice los hizo en los 2,011.17 y cerró en los 2,007.71.
Lamentablemente, no muchas acciones entre las 500 que componen el índice, se apuntaron a ese máximo. Al cierre semanal solo 33 acciones cerraron en máximos de 52 semanas, mientras que el máximo semanal fue tan solo de 58 acciones.
El S&P 500 muestra una fortaleza casi insultante, pero en cambio el Market Breadth nos dice que pocos valores siguen al índice. Lo mismo vemos en índices de base muy amplia como el RUSSELL 2000 y en menor medida en el NYSE COMPOSITE, que siguen divergiendo con en el S&P 500 al no ser capaces de hacer máximos como sí ha hecho el S&P 500.
Las divergencias son condición necesaria pero no suficiente para un cambio de tendencia, o dicho de otro modo, nos obligan a estar alerta o incluso recelosos con la subida, más aun teniendo en cuenta que, teniendo en cuenta los datos históricos del S&P 500, septiembre es el único mes bajista del año. No obstante, el precio siempre manda sobre cualquier otra consideración, también sobre las divergencias.
Sin figura de vuelta: Trend is your friend.
¡Good Trading!