Hace un mes nos hacíamos eco de la divergencia que apreciábamos en el Market Breadth. Un mercado alcista “sano” suele ir acompañado por un número notable de valores en la subida en cada máximo.
Una de las formas en que podemos comprobar esto es analizando el número de valores que hacen máximos de 52 semanas cuando el S&P 500, u otro índice, también los hace. Desde abril, prácticamente todos los máximos de 52 semanas del S&P 500 se hacían con menos de 100 valores haciendo esos mismos máximos. Incluso hubo un máximo a finales de mayo que se hizo con solo 23 valores haciendo máximos de 52 semanas.
Como con cualquier otra divergencia esto es condición necesaria pero no suficiente para un techo. Evidentemente era un dato que aumentaba las posibilidades de que, cuanto menos, el mercado tuviera dificultades para seguir avanzando con fuerza. Y no era el único dato de Market Breadth débil. También el McClellan Summation divergía con los precios y ha llegado incluso a moverse por debajo de 0 desde finales de septiembre.
Esta debilidad interna del mercado se apreciaba claramente en índices de base muy amplia como el Russell 2000 o el NYSE Composite. El primero, ha estado divergiendo todo el año y al final ha terminado por confirmar figura de vuelta bajista en el chart semanal, HCH o doble techo, tanto monta monta tanto, con un potencial de caída importante. El objetivo mínimo teórico son los 935-930 puntos del Russell 2000.
También el DAX tiene figura de vuelta entre otros índices y estas figuras de vuelta llegan en el momento en que está a punto de iniciarse la parte buena del año, en términos estacionales. La historia dice que octubre es el mes más volátil del año, donde se ven fuertes caídas pero también importantes suelos de mercado que inician importantes tendencias alcistas.
¿Análisis técnico o estacionalidad? Personalmente me quedo con el análisis técnico, que no olvidemos que en su propia metodología ya contempla equivocarse mediante el Stop Loss.
¡Good Trading!