La corrección que ha protagonizado el precio de los bonos norteamericanos podría estar llegando a su fin. Al menos dentro de un enfoque de corto plazo. Y es que a medida que pasan los días da la sensación que se va suavizando el impacto que inicialmente provocó el anuncio de que los famosos Quantitative Easing (QE) tenían fecha de caducidad.
Fíjense en el chart semanal que mostramos de la evolución del TBond 10Y ( bono a 10 años de referencia) en base semanal. Se aprecia un claro tramo bajista, que abarca los últimos dos meses (mayo y junio). El denominador común de las velas semanales que forman dicho tramo es la incapacidad de cada semana de cotizar por encima del máximo de la semana anterior. Así, ocho velas consecutivas bajo dicho patrón. Lectura inmediata: atentos al máximo de la semana previa para valorar posibilidad de que algo pudiera estar cambiando. Dicho máximo es 126,92.
Nivel que es, además, el máximo de una vela con evidentes connotaciones de «martillo». Si efectivamente se trata de un martillo, vela con connotaciones de suelo y giro alcista, la confirmación vendría con cotizaciones por encima del máximo marcado. Segunda razón para considerar clave 126,92 de cara a pensar que el proceso de reacción está en marcha.
Lo que sugiere el chart semanal, ya ha tomado cuerpo en el chart diario, con posibilidad de tener ya condiciones alcistas de la mano de mínimos relativos crecientes.
Por tanto, avances por encima del nivel clave semanal, situarían a ambos charts apuntando en la misma dirección, hacia arriba.