Mientras se sigue buscando el gran techo en la renta variable estadounidense y por ende, el final de lo que muchos solo consideran un rebote en Europa, ésta (la estadounidense) continúa registrando nuevos máximos; de todos los tiempos para sus índices tradicionales (Dow Jones Industrial Average y S&P 500) y de más de trece años para los tecnológicos (Nasdaq 100 y Nasdaq Composite) .
Y es que ese ejercicio de búsqueda permanente del techo es inútil, además de agotador e intelectualmente estéril pues es del todo imposible determinar a “priori” el punto exacto de inflexión de una tendencia que dura ya cinco años. Podemos, eso sí, determinar zonas potenciales de giro, que no es poco. Pero no es fácil…Cuando tenga que ser, será
En tanto aparece (el techo), su referente bancario PHLX KBW Bank Index (BKX) sigue ganando terreno tras una consolidación de cuatro meses por encima de sus máximos de abril de 2010 acompañando a su versión “total return” (BKXTR) que ya dejó atrás su nivel equivalente hace 10 meses. Ni el índice ni su subyacente (Wells Fargo & Company, JPMorgan Chase & Co, Bank of America Corp, Citigroup …) son por esto más alcistas de lo que ya son.
Entre la directriz alcista y la media de mínimos de la banda de medias móviles que se observa en el gráfico de velas semanales podemos establecer una guía adecuada para poder hacer un seguimiento más que razonable de la cotización a modo de stop dinámico. Ese nivel lo podemos encontrar en los 63 puntos del índice.
¡FELIZ NAVIDAD!