24 meses, dos años si lo prefieren, llevaba el sector de empresas constructoras europeas sin cerrar por debajo del mínimo del mes anterior. ¡Casi nada! La vela de junio suponía, como señalábamos en varios sectores, un claro toque de atención por las connotaciones de pérdida de inercia alcista. Y la de julio, sin duda, ratifica…