Estados Unidos tiene importantes yacimientos de “shale gas” (gas no convencional) que le permitirán soñar con la autonomía energética. La producción de estos hidrocarburos en suelo americano sigue creciendo trimestre a trimestre, y revisar las cuentas trimestrales de una petrolera, como ConocoPhillips, nos permite ver la importancia de las extracciones de gas no convencional.
América cuenta con uno de los factores de producción más importantes (la energía), a precios muy reducidos, lo que le permite aspirar a lograr una reindustrialización y la vuelta de muchas empresas del sector manufacturero. Unos precios más bajos de la energía facilitan una mayor renta disponible en un país muy dependiente del consumo.
No tener que desplegar fuerzas militares por medio mundo para garantizar el suministro de gas y petróleo, reducirá el déficit presupuestario y la carga financiera de Estados Unidos. Esta menor dependencia energética, a la vez, mejorará el déficit comercial y fortalecerá el dólar, muy necesitado de “respeto” tras muchos años de imprimir e imprimir billetes.
La revolución energética del “shale gas” está ahí. Pero, ¿cómo podemos “jugarla”? Una idea de inversión muy interesante son las MLP’s o Master Limited Partnership que, al igual que las REIT´s, cuentan con ventajas fiscales si pagan más del 90% de su beneficio vía dividendos.
Las MLP’s son propietarias de las redes de tuberías que distribuyen el “shale gas” y otros hidrocarburos por el territorio americano. Estas empresas, muchas de ellas escisiones de petroleras, cotizan en bolsa y captan capital emitiendo acciones y bonos con el objetivo de incrementar su red de distribución y hacer acuerdos a largo plazo con las petroleras.
La regulación del sector parece estable. Los márgenes con los que trabaja es previsible que se reduzcan si el precio del petróleo cae sustancialmente. Además, los frenos medioambientales parecen contenidos por la necesidad extrema de la economía americana de crear empleo y crecimiento.
Los tipos de interés juegan un papel importante, ya que estas empresas se financian a largo plazo para acometer las inversiones de transporte y acumulación de hidrocarburos. Unos tipos de interés más altos reducirán sus márgenes, a la vez que harán más atractiva la inversión en bonos, pero no parece que ese vaya a ser un problema en el medio plazo.
Este tipo de empresas forman parte del grupo de “ideas de dividendo” que muchos inversores buscan en estos momentos. Pero la selección de las mismas es una tarea difícil. Hay cientos de cotizadas en los mercados americanos. Y, bajo mi punto de vista, es preferible utilizar un ETF que seleccione una buena cesta de valores y, a la vez, proporcione liquidez en la compra y venta.
Una de esas ideas es el ALPS Alerian MLF ETF (USD), cotizado en NYSE ARCA. Se trata de un ETF que capitaliza más de 6.000 millones de dólares y negocia entre 2-4 millones de acciones al día. Paga dividendos trimestrales (que a los precios actuales suponen un 5,7% de rentabilidad) y que esperamos crezcan en el futuro.
No está de más conocer este tipo de inversiones si lo nuestro es la recolección de dividendos o cupones y la espera de revalorización en el activo comprado. En esta ficha hay información detallada sobre sus características y su cartera.
Por último, déjenme que les muestre otra idea de inversión. Cada vez que estoy entre amigos recuerdo que, sea cual sea el negocio que genere actividad y riqueza (da igual que se trate de la tecnología o la construcción o el mercados de bonos o, como es el caso actual, la energía), siempre hay un ganador seguro. Esos son los bancos de inversión, que financian, colocan en bolsa, fusionan, escinden, empaquetan, venden y revenden…. los activos de las compañías que están en un buen momento:
The Goldman Sachs Group, Inc. (GS) -NYSE
JPMorgan Chase & Co. (JPM) -NYSE