Planea la duda en los mercados de renta variable europea de si la actual corrección supone eso, una mera corrección, o parte de un proceso bajista de mayor calado. En nuestro compromiso por compartir referencias y aspectos claves a tener presentes para ir despejando dudas y decantando la balanza hacia uno u otro escenario, hoy dedicamos unos minutos al índice sectorial bancario. Concretamente al que incorpora los dividendos abonados a los valores que lo integran.
Como se aprecia en el chart semanal, la referencia mencionada en el título del artículo, 334, es el mínimo marcado hasta la fecha en la corrección desarrollada en las últimas semanas. Y lo relevante no es que sea 334 o 333 o 335, sino la zona donde se produce. En plena banda de medias que en la corrección previa – desarrollada entre enero y marzo de este mismo año – ya funcionó como zona de apoyo y frenada para los descensos.
Por tanto, consideramos el mínimo de la pasada semana, 334 puntos, un buen termómetro de la temperatura que puede alcanzar la corrección. Respetarlo equivaldría a pensar en enfriamiento bajista, o tramo correctivo finalizado, y probable reanudación alcista. Obviamente, perforarlo supondría justo lo contrario, más caída, al menos hasta el mínimo de marzo.